lunes, 19 de noviembre de 2018

Ojos que no lloran Capítulo 1

Capítulo 1





A últimas fechas no había logrado dormir bien. Pablo solía miccionar por las noches más de lo habitual, antes lo hacía dos veces y ahora tres o hasta cuatro, todos sabíamos la razón, tenía miedo, y aunque nosotros le comprendemos, esto es de suma peligroso, los sublevados son las personas más avispadas que conozco, y dado que nos encontramos en territorio de nadie, la descampada nos hace más visibles. Desde acá arriba es posible divisar el río Manzanares y la ciudad y sus escombros que día con día se hacen más grandes. Gracias a Dios hemos hallado este pequeño refugio, en una cueva que más parece socavón, estratégicamente protegida por una roca enorme que por ventura del cielo llegó rodando desde más arriba de la montaña, tal vez tras el impacto de una bomba, y el follaje de los árboles que aunque maltrechos y delgados aún nos protegían. Yo ya no tengo miedo, sino más bien tristeza es lo que me embarga, había perdido a mi madre hacía a penas un año, y lloré como un niño, porque entonces lo era, tenía once años, y ahora que tengo doce me considero todo un hombre. Pero siendo sincero, soy débil y de cuando en cuando lloro, por supuesto que siempre lo hago en secreto, no quiero que los niños más pequeños me vean sufrir, menos aún porque aunque no sea oficial yo soy su líder. La tropa se integra por cinco chicos, sí, somos bastantes, Javier tiene tan solo diez años y es quien me sigue más próximamente en edad, Julián tiene ocho años, Fernando siete y el más pequeño Pablo cinco. Les conocí a todos ellos de las más diversas maneras, pero fue Pablo quien más poderosamente llamó mi atención, y es que era él ya toda una leyenda en el barrio en que vivíamos, su "fortaleza" era consabida, y hasta mítica, el niño no lloró cuando su padre le dejó cuando tenía cuatro años, allá en el pueblo de donde su madre le trajo a Madrid buscando la paz y hallando solo la muerte, la señora Teresa murió hace apenas seis meses, de una forma trágica, sin embargo, Pablo no lloró entonces, ni siquiera ahora lo hace, y eso al principio me cabreaba, pero ahora francamente solo me asombra y conturba, la señora Alba, vecina nuestra y amiga del pueblo de Pablo me ha dicho que era común que el niño no llorase incluso cuando su abuela los zurraba a él y a sus primos por cualquier nadería y que era siempre el único. Un día le pregunté a la señora Alba si le había visto llorar de bebé, la señora Alba sólo se encogió de hombros y me respondió «No que yo sepa».
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sábado, 17 de noviembre de 2018

Curiosidades sobre Rigoletto

CURIOSIDADES SOBRE RIGOLETTO

IRIS HERNÁNDEZ ROBLES — 10/11/2018








Imagen vía Pixabay.

Cierto que hoy por hoy el número de personas que asisten a la ópera es reducido, de
alguna manera se explica esto por el costo de las funciones, cosa que el mismo periódico
The Guardian ha expuesto sagazmente en artículos que datan del 2001, más
recientemente, sin embargo, ha hecho un estudio sobre la importancia de la ópera en la
vida de los humanos y para ello ha contado con la participación de los directores de las
siete casas de ópera más importantes del Reino Unido, primeramente cada uno debe
explicar porque es tan importante la ópera en el espíritu de los hombres y segundo
recomendar algunas óperas para los menos avezados, curiosamente prácticamente todos
coinciden en preconizar la ópera Jenůfa de Janáček, o a Peter Grimes de Britten, también
goza de recomendación Don Giovanni y por supuesto, no podía faltar una ópera de Verdi,

Don Carlos. Sin embargo, los sitios web franceses dedicados a la recomendación de
óperas suelen ser mucho más clásicos en sus opiniones, tal es el caso de Classique C’est
Cool ! O France culture, y sea por mero amor patriótico o franca predilección, se decantan
ambos por recomendar Carmen como la ópera cumbre que se ha de ver al menos una vez
en la vida, sea para redescubrir sus arias o para comenzar a enamorarse de la ópera, el
caso es que pese a todo colocan a Rigoletto como una obra imprescindible, tanto por su
aria La Donna è Mobile, la cual France culture la posiciona en el número diez de las arias
inolvidables, como por la belleza de su argumento, Rigoletto es parte esencial del
repertorio operístico del mundo y una de las más representadas en el orbe según Opera
sense, uno de los sitios web más respetados sobre ópera, dando a la Traviata el número
uno como la ópera más popular y representada del planeta, por lo que no ha de ser
coincidencia que el mismo compositor se encuentre detrás de la ópera que está en la cima
del top 10 y otra que se halla al menos en ella. Personalmente, considero a Rigoletto la
ópera más sublime del mundo y me fio de la misma opinión que alguna vez tuvo Verdi al
referirse a su Rigoletto como algo grande, esto fue lo que escribió Verdi en 1850 a Piave
su más cercano libretista durante su reclusión en Busseto: El padre que sufre por la honra
perdida de su hija maldice al bufón que se burla de su dolor. Esta maldición perturba de
un modo espantoso al bufón, que acabará sufriendo la misma pena. Esto es grande, muy
grande. Incluso Víctor Hugo, el creador de la obra teatral Le Roi S’amuse la base de
Rigoletto, se mostró satisfecho por la ópera, pese a que hubo problemas de derechos de
autor con respecto al argumento. Verdi también mencionó inmortalmente que: Hubiera
sido capaz de escribir otro Otello, pero jamás hubiera podido hacer otro Rigoletto. Es más
que evidente que Rigoletto significó mucho para Verdi, incluso más que su célebre
Traviata cuyo argumento es muy femenino, Violetta Valéry es un personaje muy
psicológico, además de que el eje central es el amor romántico, uno que Verdi ya había
superado y mutado por uno más sublime y perfecto, el amor de padre, pues, aunque volvió
a conocer el amor por medio de Giuseppina Strepponi desde 1843, no se puede obviar el
hecho de que Verdi perdió a todos sus hijos aún antes de esa relación, viéndolos morir
uno a uno siendo demasiado pequeños; este hecho lo llevó a comprender naturalmente
que el amor de padre es invaluable, pues por mucho que se idealice el amor de dos
amantes, siempre estará entremezclado con algo de interés egoísta y sobre todo
sexualidad. El argumento de Rigoletto es muy llamativo, debido a lo asombroso de su
contraste, el hecho de que un bufón despreciable, tanto en el interior como exterior, pueda
llegar a amar tan celestialmente a su hija adolescente, es pasmoso, pues alecciona como
un ser tan vil puede comprender un sentimiento tan profundo y puro, que, sin embargo,
nace naturalmente, es decir, a ningún padre se lo ha de forzar para amar a sus hijos, sino
más bien se considerará cosa extraordinaria o fuera de lo cotidiano que no lo hagan; es
cosa propia de artistas hacer visibles los grandes acontecimientos del sentir humano, por
lo que hacer recordar que un tipo de amor así existe, es real y perceptible a diario, es una
labor brillante, por lo que las tendencias artísticas propias de Verdi se inclinaron de
inmediato al argumento de Rigoletto, esto era inevitable, ya que cual buscador de tesoros
el artista tiende a buscar los diamantes del alma. Ese descubrimiento, del amor paternal
como el más perfecto, quiso Verdi exteriorizarlo y hacerlo público, pues también como
buen artista siempre busca dar un mensaje positivo que trascienda e insufle las verdades
de lo que existe bello en el universo al humano, pues entre lo que es bello y bueno hay tal
sinonimia y misma etimología, bellus es la contracción de la palabra latina benulus
diminutivo a su vez de bonus, palabra de la que procede bueno, por lo que su trabajo
artístico se ha cumplido al mostrar lo más bueno y bello que hay en la Tierra: El amor
paternal. Sin embargo, los administradores de La Fenice no lo vieron así, muy por el
contrario, tildaron a la obra de vulgar y sicalíptica por lo que fue censurada pese a que

fue la misma administración del Teatro quien pidió una nueva obra a Verdi. Tras esta
fatídica decisión de La Fenice no solo se encontraban inmiscuidos meros intereses
estéticos o de displacer, sino más bien políticos, pues en la obra original se mencionaba
a un rey, de hecho, el rey de Francia era el protagonista y el bufón un mero soporte
argumentativo, y esto con llanas intenciones de denuncia pues era esta la pretensión de
Víctor Hugo, evidenciar la vida licenciosa del monarca de Francia, en aquella época
Venecia, se encontraba gobernado por la Casa Austriaca, en cuya cabeza se situaba un
monarca famoso, el archiconocido Francisco José I, sí, ese que tuvo uno de los reinados
más longevos en la historia, el que su madre quiso desde siempre como rey aún más que
su esposo y por el cual no dudo en conspirar, el que se casó muy joven y con una señorita
que siempre fue considerada como una rebelde (en comparación con las normas y
rigurosos modos protocolarios de la corte), por lo que los censores de la ciudad y los
administradores de La Fenice previeron un escándalo, lo que no era para nada impensable.
Deprimido tras la negativa, Verdi se refugió en su pueblo natal Busseto, durante tres
meses, tiempo que le sirvió para reflexionar, intercambiar cartas con Piave el libretista de
Rigoletto y sobre todo no rendirse. Luego de ese lapso Verdi se volvió a entrevistar con
los administradores de La Fenice y esta vez realizó varias concesiones con tal de que su
ópera pudiese representarse, primero, el nombre debió mutar de Le Rois S’amuse a uno
menos comprometedor como Rigoletto (palabra italiana que se desprende de rigolo que
significa divertido) italianizando el nombre del bufón que en su versión original se
llamaba Triboulet, además de cambiar el lugar donde se desarrollaba pasando de un reino
a un ducado, ubicado en la ya extinta región de Mantua, haciendo del personaje libertino
del rey un simple duque, también se modificaron varias escenas, como la célebre
inmediatamente anterior al aria La Donna è Mobile cuando el duque de Mantua es
recibido en casa de Sparafucile próximo a ser asesinado pide “Una habitación y vino” y
no “A tu hermana y vino” sabiéndose perfectamente que a lo que iba era a tener intimidad
con la hermana de Sparafucile pues era ella meretriz, perdiendo por tanto un poco de
sentido esta escena ya que Rigoletto y su hija miran desde afuera, con la intención de que
esta última descubra la perfidia y abyección de su amado duque alias “Gualtier Maldé”.
Pese a las dolorosas modificaciones la ópera fue representada y con muchísimo éxito,
brillante fue la actuación de Raffaele Mirate como el Duque de Mantua, Teresa Brambilla
como Gilda hija del bufón, y por supuesto la extraordinaria interpretación de Felice Varesi
como Rigoletto, quien se aterró por el personaje que debía interpretar tanto por su
dificultad como la incomodidad que conllevaba portar todo el tiempo una joroba, sin
embargo, fue Verdi quien literalmente le empujó al escenario haciendo que trastabillara,
lo que el público tomó de manera muy jocosa. Al día siguiente de su estreno la gente
tarareaba con alegría el aria La Donna è Mobile, causa también del éxito de Rigoletto. En
1994, el famoso director Ricardo Muti intentó limpiar la obra Rigoletto de Verdi de las
exageradas florituras que solían agregar varios divos de la ópera, lo cual logró en una
magnífica y limpia representación en la Scala de Milán ese año, la cual fue aplaudida y
transmitida por radio en toda Italia, se le conoció como Rigoletto sin agudos. Pese a que
La Donna è Mobile no fue el aria favorita de Pavarotti (esta era El cantante italiano de
“El caballero de la rosa”) la eligió para cerrar triunfal su presentación en Módena, su
tierra natal, esta aria fue muy significativa, el recital lo realizó al lado de muchas estrellas
pop como Sting, Bryan May, Luccio Dalla y Zucchero y Bob Geldof entre otros con
presencia de la princesa Ana de Inglaterra. En el prólogo de Le Roi S’amuse Víctor Hugo
recalca que su obra es demasiado moral y le asombra que se la censuren por inmoral
cuando el tema es el amor paternal, tal como se ve en la escena III del acto dos donde las
palabras de encuentro entre Rigoletto y su hija no podrían ser más tiernas: Ma Fille ! (¡Mi
hija!) dice Rigoletto y ella contesta “Oh! Mets tes Bras a l’entour de Mon cou –Sur Mon

coeur!-. Pres de toi, tout rit, rien ne me pese. Enfant je suis heureux, et je respire a l’aise”
(¡Oh! Pon tus brazos alrededor de mi cuello -en mi corazón- Cerca de ti, todo es risa, nada
me pesa. Niña, yo soy feliz y yo respiro a gusto).

lunes, 12 de noviembre de 2018

Poema "Vacío"

Vacío

Definir lo que siento, 
No puedo,
Intangible el espacio
Y una brasa que ahoga
Y no quema al final,
El defecto que se perpetua
Por uno solo,
Que vence y 
Domina la vida,
Para él cual no hay oposición.
¿Qué soy entonces?
Un ludibrio de mi ser,
Que por un elemento se corroe,
Jadeo y he ahí mi penitencia,
Que veo mi tortura y que 
sin embargo no puedo desaparecer le...
El verdugo del mismo verdugo,
El mal empleado del patrón que 
No es otro sino sí mismo,
Te he fallado y he 
Maltejido los calcetines,
¿Y como alejarte de mí? 
Si el vacío preferiría que tú,
Mal guía de mi vida, 
Dictador funesto, 
Desde hoy me rebelaré y 
Venturosamente algún día te venceré, desesperación,
Que como círculo,
Entre más intento vencerte...
Desespero.